Inflamación crónica de bajo grado y riesgo cardiovascular
Resumen
La inflamación crónica de bajo grado (ICBG) se caracteriza por la elevación persistente en los niveles de mediadores proinflamatorios y células inmunitarias circulantes. Desde finales del siglo pasado se ha recolectado evidencia del vínculo que existe entre este tipo de inflamación y el desarrollo de enfermedades metabólicas y cardiovasculares. Las enfermedades cardiovasculares son un serio problema de salud en ascenso debido al envejecimiento de la población y la pandemia de obesidad que enfrenta la población actual. Ambos fenómenos están relacionados con el deterioro cardiovascular mediante la ICBG, la cual a pesar de no producir lesiones de forma evidente si aumenta el riesgo de padecer una enfermedad cardiometabólica, teniendo como desencadenantes el envejecimiento inflamatorio y la desregulación del tejido adiposo. Esto conlleva a la liberación de citocinas proinflamatorias y especies reactivas de oxígeno, al mismo tiempo que disminuyen los niveles de citocinas antiinflamatorias y óxido nítrico, que en conjunto producen disfunción endotelial, lesiones en la musculatura lisa vascular y alteran la regulación de la presión arterial, creando un ambiente propicio para el desarrollo de diversas enfermedades. Por tales motivos, es pertinente describir en esta revisión los mecanismos fisiopatológicos mediante los cuales la ICBG aumenta el riesgo de desarrollar una enfermedad cardiovascular. Igualmente, resulta de utilidad estudiar cuáles son los posibles biomarcadores y blancos terapéuticos que permitirían modular la respuesta inflamatoria y disminuir el riesgo de presentar estas enfermedades.