Los primeros 1 000 días. Una programación de salud para la vida
DOI:
https://doi.org/10.59542/CRANM.2024.XXXI.9Resumen
Los primeros 1 000 días de vida son una ventana única de oportunidades para programar la salud a futuro. En este período se puede establecer una programación temprana para la prevención de enfermedades no transmisibles. Es el momento ideal para la intervención de cuatro parámetros fundamentales: embarazo a término, parto vaginal, antibióticos y lactancia materna. La colonización intestinal es trascendental para la programación metabólica, endocrina, inmunológica y neurológica. La microbiota intestinal impacta la maduración del intestino, del sistema inmune y del desarrollo cognitivo del niño. La disrupción intestinal puede aumentar el riesgo de enfermedades en edades posteriores. Existen evidencias científicas de que la disbiosis se correlaciona con estados inflamatorios, como ocurre en la enfermedad inflamatoria intestinal, desórdenes autoinmunes, alergia, obesidad, diabetes mellitus, trastorno del espectro autista. Hallazgos recientes sugieren que el contacto microbiano comienza previo al nacimiento, se han identificado géneros y especies de microorganismos en la placenta, líquido amniótico, cordón umbilical y meconio. Sin embargo, todavía se debate la existencia de una microbiota placentaria.