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http://hdl.handle.net/10872/22793
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Título : | Arias Antiguas del Nuevo Mundo Siglos XVII y XVIII |
Autor : | Sans, Juan Francisco |
Palabras clave : | Arias Música Repertorio Musicólogo Minuet Oratorio Villancicos Música barroca Orquesta Texto musical |
Fecha de publicación : | 2018 |
Editorial : | Fondo Editorial de la Facultad de Humanidades y Educación Universidad Central de Venezuela |
Resumen : | Las arias antiguas como material didáctico.
Alessandro Parisotti (1853-1913) publicó en 1885 un libro de partituras titulado Arie Antiche con la casa Ricordi de Milán, consistente en una antología de arias y canciones barrocas italianas a solo de los siglos XVII y XVIII, con compositores como Bononcini, Caldara, Carissimi, Cesti, Jommelli, Legrenzi, Leo, Lotti, Marcello, Martini, Paisiello, Pergolesi, Piccini, Antonio y Domenico Scarlatti, Vivaldi, Traetta, además de otros autores no italianos como Gluck y Händel (con arias con texto en italiano), arregladas para voz y piano por Parisotti. Su idea –expresada en el prefacio de su libro– era la de rescatar de un inmerecido olvido todo un
repertorio de canciones y arias de compositores totalmente desconocidos para su época, y proveer de este modo a sus contemporáneos de modelos del arte del canto italiano que permitieran “purificar el gusto” a través de una “resurrección de lo antiguo”. Parisotti “exhumó” –según sus propias palabras– una inmensa cantidad de viejas ediciones y manuscritos de autores italianos barrocos, de donde tuvo forzosamente que seleccionar unas pocas obras para publicar su libro, dejando por fuera mucha música de excelente factura. Vista la magnífica recepción inicial que tuvo, se dio a la tarea de publicar con la misma casa Ricordi un segundo volumen en 1890, y un tercero en 1900. Estos incluyeron arias de Bassani, Blangini, Bononcini, Caccini, Cavalli, Cesti, Cherubini, Cimarosa, Del Leuto, De Luca, Durante, Falconieri, Fasolo, Gasparini,
Giordani, Marcello, Monteverdi, Paradies, Pergolessi, Peri, Piccini, Rontani, Rosa, Sarro, Scarlatti, Spontini, Stradella, Tenaglia, Traetta y Vinci, además de piezas de autores no italianos como Dalayrac y Händel. En 1894, la casa Schirmer de Nueva York publicó una antología bilingüe del trabajo de Parisotti con traducciones al inglés a cargo de Theodor Baker, que tuvo un éxito editorial sin precedentes. Por su genuina propuesta, originalidad, accesibilidad y buen criterio editorial, el texto de Parisotti se constituyó en una de las piedras miliares de lo que hoy
llamamos la “música antigua”, contribuyendo de manera crucial al revival del período barroco
que se verificaría ya bien entrado el siglo XX. Aunque la colección estaba explícitamente destinada a suplir de música de cámara italiana a las salas de concierto y a los salones privados, muy pronto se ganó el favor de profesores y estudiantes del arte lírico, convirtiéndose en el libro de texto obligado en todas las cátedras de canto de los conservatorios y escuelas de música del
mundo, lugar que todavía hoy ocupa de forma indisputable. Sus ininterrumpidas reediciones
hasta nuestros días dan testimonio de que las Arias Antiguas de Parisotti han constituido uno
de los éxitos más resonantes en la historia de la edición musical. Además, su amplia difusión
como texto escolar coadyuvó definitivamente a imponer el italiano como lengua “natural” del canto, estableciendo un canon que dejó de lado importantes y antiguas tradiciones del arte
lírico como la alemana, la inglesa, la francesa y la española. A partir de Parisotti, el canto lírico es canto italiano por antonomasia.
Es precisamente con el ánimo de rescatar una de estas tradiciones –la española, y más específicamente, la hispanoamericana– que se publica el presente volumen de Arias Antiguas del Nuevo Mundo. Inspirado en la idea de Parisotti, este libro contiene arias barrocas en arreglos para voz y piano, compuestas durante los siglos XVII y XVIII para las capillas musicales de catedrales, conventos y cortes virreinales en los territorios de la América colonial. Se trata de un repertorio prácticamente desconocido por los cantantes actuales, pero de inmenso valor musical, literario e histórico, cultivado en el Nuevo Mundo durante los dos últimos siglos del
periodo de dominación hispánica. Maestros como Esteban Salas (1725-1803), Manuel de Sumaya (1678-1755), Esteban Ponce de León (ca. 1692-175?), Juan de Herrera (ca. 1665-1738),
Tomás de Torrejón y Velasco (1644-1728), José de Orejón y Aparicio (1705-1765), Rafael
Antonio Castellanos (1765-1791), Manuel José de Quiroz (1738-1765) o José Francisco Velásquez “el joven” (1781-1822) –quienes ejercieron su magisterio musical en un gigantesco ámbito geográfico que abarcó el Virreinato de la Nueva España (Catedrales de Oaxaca, Puebla y México), el Virreinato de Nueva Granada (Catedral de Bogotá), la Capitanía General de Guatemala (Catedral de Guatemala), el Virreinato del Perú (Catedral de Lima y Seminario San Antonio Abad del Cuzco), la Capitanía General de Cuba (Catedral de Santiago) y la Capitanía
General de Venezuela (Catedral de Caracas y Oratorio de San Felipe Neri)– recorren este volumen con composiciones originales para voz y acompañamiento instrumental (arias, cantadas,
oratorios, minuetos, seguidillas y villancicos con sus respectivos recitativos), equiparables en lirismo, calidad musical y técnica a las de sus contemporáneos italianos.
Se intenta así dotar a las cátedras de canto de Hispanoamérica de un material análogo al de
Parisotti, contribuyendo de este modo con la popularización de un extraordinario repertorio en castellano entre los cantantes líricos. Las fuentes de esta música se encuentran en publicaciones musicológicas especializadas de muy difícil acceso o agotadas desde hace mucho tiempo, o bien en partes manuscritas en ignotos archivos musicales, por lo que constituyen materiales imposibles de ser utilizados en las cátedras de canto, pues requieren de una adaptación especial para sus requerimientos. Estas obras no fueron concebidas para la enseñanza, sino para su utilización en las
capillas musicales del Nuevo Mundo. Resulta pues indispensable adecuarlas a los usos y costumbres de las cátedras de canto de nuestro tiempo, sin dejar de tomar en cuenta las más escrupulosas prácticas filológicas. Precisamente por ello, su adaptación a nuestros fines y tiempos conlleva un sinfín de retos que se han procurado sortear de la manera menos invasiva posible, pero también de la más eficiente: un equilibrio bastante difícil de lograr.
Se espera con este trabajo estimular a los cantantes líricos al estudio cada vez más intenso y profundo de la música antigua de Hispanoamérica, poniendo a su disposición estas partituras en un formato plenamente accesible. Tal como ocurrió con Parisotti y sus tres volúmenes de arias antiguas, se cuenta con material suficiente como para publicar al menos dos libros más similares a éste. Dependerá en todo caso del apoyo que los intérpretes brinden a este trabajo, así como del favor dispensado al mismo por el público y la crítica especializada, el que se pueda pensar en continuar desarrollando este proyecto. |
URI : | http://hdl.handle.net/10872/22793 |
ISBN : | 978-980-00-2899-5 |
Aparece en las colecciones: | Libros
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